I. Preguntas sobre la vida eterna Vs. 16, 17
A. Es más profundo de lo que usted piensa
1. Fue encomiable que este joven hiciera esta pregunta.
2. Llegó corriendo y se arrodilló. Seriedad y humildad (Marcos 10:17).
3. Llegó pensando que la solución no estaba lejos de su alcance.
4. Cuando hablamos de vida eterna, estamos alcanzando el infinito.
5. No solo está fuera de nuestro alcance; es infinitamente superior y más grande que cualquiera de nosotros.
6. Es como saltar el Gran Cañón: unos llegan más lejos que otros; ninguno lo logra.
B. Tenía una perspectiva inferior de lo que se requería
1. El joven preguntó: “¿Qué debo hacer”?
2. Pensó que tenía la capacidad de obtener la vida eterna mediante sus propios esfuerzos.
3. Tenía una alta opinión de sus habilidades y una baja opinión del cielo.
4. Algunas personas piensan que el cielo es solo el paso final que damos en nuestro ascendente viaje de superación personal y logros.
5. Sin esta corrección de Jesús, habría seguido pensando que el cielo estaba a su alcance gracias a sus propios esfuerzos.
C. Idea incompleta de quién era Jesús
1. Jesús no lo reprende, pero lo desafía a pensarlo detenidamente.
2. Jesús dijo que nadie era “bueno” sino solo Dios.
3. Jesús no lo corrige por llamarlo “bueno” diciendo que no lo haga.
4. Jesús le pide a este joven que conecte los puntos: Jesús es Dios.
5. Este joven estaba más interesado en lo él que tenía que hacer …
Jesús le señala lo más importante: quién es Jesús.
6. ¿Por qué es importante esto?
a. Si usted tiene una opinión baja de Jesús, tendrá una opinión baja de sus respuestas.
b. Si usted cree que Él era Dios encarnado, aceptará sus respuestas.
c. Si Jesús era menos que Dios, entonces sus respuestas son discutibles.
d. Si Jesús era Dios, entonces sus respuestas no son negociables.
7. Pregunta -¿Quién dice usted que es Jesús? Su respuesta determinará cómo responde.
II. La búsqueda del joven por la vida eterna Vs. 17-22
A. Jesús le “ofrece” la opción de “obras”- guardar los mandamientos
1. El joven está emocionado: “¿Por dónde empiezo?” A mucha gente le gusta esta idea.
2. Jesús hace referencia a los Mandamientos 5-9, que tratan de la interacción humana.
3. Los 10 mandamientos se encuentran en Éxodo 20:1-17
a. V. 18- Mandamiento #6- No matarás- comparar con Mateo 5:21, 22.
b. V. 18– Mandamiento #7- No adulterarás- comparar con Mateo 5:27, 28.
c. V.19b- Ama a tu prójimo como a ti mismo- un resumen de lo anterior.
d. Las leyes de Dios no solo se juzgan externamente, también se juzgan internamente.
e. Dios no solo juzga nuestras acciones y palabras, sino también nuestras actitudes e intenciones.
4. El joven erróneamente creía que había guardado todos los mandamientos de Dios.
5. Si ese era el caso, ¿por qué no se sentía completo con respecto a su entrada al cielo?
6. Nadie puede entrar al cielo por buenas obras porque todos han fallado. Romanos 3:10-20
B. La gran realización
1. Aunque se creía espiritualmente exitoso, sabía que le faltaba algo.
2. ¿Qué nos dice esto?
a. La realización de obras religiosas y morales no satisface el alma.
b. Este joven sabía que las “obras” no eran suficiente. Su corazón sabía esto.
c. ¿Qué más me falta? ¡Increíble combinación de seguridad en uno mismo y conciencia de vacío! Defenderse mientras confiesa el vacío.
C. El profundo desafío del corazón
1. Jesús sabía lo que alejaba a este hombre del Reino de los Cielos: el amor al dinero.
2. Marcos 10:21 Entonces Jesús, mirándole, le amó, y le dijo: Una cosa te falta…” Porque Jesús lo amaba, lo desafió y lo corrigió.
3. Jesús le dijo- abandona lo que más amas en la tierra, ámame a mi y gana el cielo.
4. Esta palabra de Jesús habría llevado al joven a Deuteronomio 6: 5.
5. Deuteronomio 6:5 Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas.
6. A pesar de todas sus buenas obras, el joven no estaba dispuesto a renunciar a sus posesiones.
7. A pesar de la moral y la religión, amaba sus posesiones más que a Dios.
8. Se amaba a sí mismo más de lo que amaba a Dios.
9. No todos somos llamados a dar todo, pero sí a amar a Dios supremamente.
No podemos amar a dos señores. Ir a Mateo 6:24
NOTA- Jesús sabía cuál era la lucha de este hombre: tesoros en la tierra
Observe que Jesús le ofreció tesoros en el cielo. ¿Qué tesoros quiere usted?
III. Una desesperanza saludable
A. El dilema de los discípulos Vs. 23-25
1. Jesús explicó la dificultad que tenían los ricos para entrar al cielo.
a. Camello y ojo de aguja: cualquiera es imposible, pues Jesús hablaba de un camello real y una aguja real.
b. O, es difícil pero no imposible: Una de las puertas alrededor del muro de Jerusalén se llamaba “Ojo de la aguja”, y los camellos tenían que arrodillarse para entrar.
2. Esa cultura creía que los ricos eran favorecidos por Dios.
3. Si los ricos no podían salvarse, ¿quién podría salvarse?
B. El problema
1. Todo lo que amamos se convierte en nuestro dios.
2. Ir a Mateo 6:19-21; Mateo 16:24-26
3. Necesitamos decidir si vale la pena amar a nuestros dioses o amar a Cristo.
C. La respuesta a nuestra desesperanza- Jesucristo V. 26
1. Su pregunta: ¿quién puede salvarse?
2. La respuesta de Jesús: Por la obra de Dios en un corazón humano, cualquiera puede ser salvo.
3. El hombre moral vacío puede ser llenado.
4. El hombre que ama las “cosas”, puede cambiar, crecer y amar a Dios supremamente.
5. La respuesta se encuentra en el versículo 14: debemos llegar a ser como un niño.
Alcanzar la vida eterna mediante los esfuerzos del hombre es imposible.
- El estándar de Dios es la perfección, tanto exterior como interior.
- Este joven se veía bien por fuera, pero era culpable por dentro.
La respuesta a su pregunta se encuentra en la parte inicial de este pasaje.
- El versículo 14 nos dice que debemos acercarnos a Jesús como niños.
- Dependiente, indefenso, confiado, esperanzado, creyente.
Otra pregunta podría ser la siguiente: ¿cómo puedo cambiar y ser como un niño pequeño?
- ¿Cómo puedo hacer el cambio de la autosuficiencia a la dependencia de Dios?
- ¿De la autopromoción al quebrantamiento?
- ¿De amar a las cosas a amar a Dios?
- Puedo cambiar mi comportamiento, pero ¿cómo puedo cambiarme interiormente?
Una vez más, Jesús nos da la respuesta:
- Es imposible para el hombre, pero todo es posible para Dios.