I. Verdades que nos ayudan a soportar las pruebas Vs. 9-12
A. Considerar lo eterno Vs. 9-11
1. V. 9– El cristiano que es materialmente pobre en este mundo debe gloriarse en su exaltada posición como hijo de Dios.
a. Sus pecados son perdonados por su fe en la sustitutiva muerte de Jesús.
b. Dios está con él todos los días de su vida. Guiando, protegiendo, proveyendo.
c. Tiene un lugar en el cielo, reservado para él.
d. Las promesas y bendiciones eternas superan con creces las deficiencias temporales.
e. Estas verdades deben ayudar al “hermano humilde” a soportar las dificultades temporales.
2. Vs. 10, 11– El cristiano rico puede regocijarse en la verdad de que ha sido “abatido” al darse cuenta de su necesidad de un Salvador. Al humillarse, le pidió a Dios el perdón de sus pecados, y lo recibió.
a. El cristiano rico tiene la bendita comprensión de que él y sus riquezas pueden perecer rápidamente.
b. Esto le da una perspectiva adecuada sobre cómo vivir en este mundo.
c. Tan rápido como la hierba o las flores se desvanecen bajo el sol, puede morir el hombre rico.
d. Si el cristiano rico espera que sus riquezas lo ayuden a soportar las pruebas, debe recordar que sus riquezas pueden desaparecer de la noche a la mañana y no son confiables.
e. El rico necesita verse a sí mismo en el mismo contexto que el pobre.
f. Uno que es perdonado y que tiene la promesa del cielo.
g. 1 de Juan 2:17 Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.
3. Estas dos verdades yuxtapuestas tienen el propósito de darnos perspectiva.
a. Se presentan como verdades para ayudarnos a soportar las pruebas.
b. Se presentan para mostrarnos que, sean ricos o pobres, todos los cristianos esencialmente deben reducir su existencia a verdades que son eternas, no temporales.
c. Lenski- “Así como el hermano pobre olvida toda su pobreza terrenal, así el hermano rico olvida todas sus riquezas terrenales. Por la fe en Cristo, los dos son iguales.”
B. Las bendiciones de soportar la tentación V. 12
Bienaventurado- supremamente bendecido, feliz.
Soporta- soportar con valentía y calma.
Tentación- aflicción, pruebas, tentaciones para pecar, prueba para probar la calidad de nuestra fe.
1. A veces Dios envía pruebas para probar la calidad de nuestra fe.
2. A veces Satanás envía tentaciones para incitarnos al pecado, al fracaso o la destrucción.
3. El versículo no dice…
a. “Bienaventurado el hombre que nunca es tentado”.
b. “Bienaventurado el hombre que encuentra la tentación fácil de vencer”.
c. Sí dice: “Bienaventurado el hombre que soporta (supera) la tentación”.
d. Cuando decimos “no” a la tentación, le estamos diciendo “sí” a Dios.
4. Ya sea que experimentemos una prueba o una tentación, los cristianos somos llamados a perseverar.
a. Soportar la prueba- no ceder solo para escapar de la prueba; no comprometerse, no tomar una vía de escape impía para terminar con las dificultades.
b. Soportar la tentación -No ceder a la tentación pecaminosa; no entregarse a los deseos de la carne, de los ojos o del orgullo de la vida.
c. Soportar tentaciones / pruebas significa que elegimos hacer lo que Jesús haría
5. Ser aprobado– Este es el propósito de Dios, aprobar la calidad de nuestra fe.
6. ¿Cuál es el resultado de soportar las pruebas/dificultades/tentaciones?
a. Bienaventuranza; gozo supremo, felicidad, un estado emocional y espiritual de bienestar.
b. No hay vergüenza ni tristeza, sino que en su lugar, hay gozo.
c. No hay control de daños ni encubrimiento, sino apertura y libertad.
d. No hay desilusión, sino que en su lugar, hay felicidad de haber aguantado.
7. La corona de la vida– La vida cristiana es una de soportar pruebas y nunca apartarse de Cristo. Si permanecemos con Jesús, recibimos vida eterna.
8. A los que le aman – este es el motivo por el que resistimos la tentación.
a. “Se necesita pasión para conquistar una pasión”
b. Nuestra pasión por Dios, por Su reino, por santidad y por ser usados por Dios.
c. Puede que haya muchas menos razones para no pecar, pero la más importante es nuestro amor por Dios.
d. Génesis 39:9 No hay otro mayor que yo en esta casa, y ninguna cosa me ha reservado sino a ti, por cuanto tú eres su mujer; ¿cómo, pues, haría yo este grande mal, y pecaría contra Dios?
II. Entender el pecado Vs. 13-15
A. Dios nos prueba, pero no nos tienta V. 13
1. Dios no es la fuente de la tentación. Esa nunca es Su intención para ningún ser humano.
2. Es inmune a ser tentado por el pecado. No es su naturaleza tentar a la gente a pecar.
3. Al contrario, Dios obra fuertemente en sus hijos para que no pequen. (Santiago 4:1-7)
B. El pecado empieza con nosotros, no con Dios
1. En cambio, hay un claro proceso paso a paso que ocurre cuando elegimos pecar.
a. Su propia concupiscencia- todos tenemos tendencias y predisposiciones particulares hacia el pecado.
b. 1 Juan 2:15-16 15 No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. 16 Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.
c. La causa y fuente del pecado está dentro de nosotros. No podemos culpar a nadie mas
d. Otros pueden tentarnos, pero la fuente del pecado está dentro de nosotros.
e. Efesios 2:3 entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás.
2. Atraído– Algo viene y busca alejarnos de Dios.
3. Seducido– Se da una oportunidad que nos ofrece la oportunidad de satisfacer nuestros deseos de una manera impía y pecaminosa. Se ofrece la “carnada” y en ese momento, decidimos.
4. La concupiscencia… ha concebido – Considere el óvulo humano y el esperma cuando se encuentran y lo que sigue después de eso. Comienza tan pequeño y se vuelve tan complejo. Se vuelve cada vez más enredado.
5. Da a luz el pecado – El pecado nace y ahora existe.
6. El pecado… da a luz la muerte– Si no se controla, el pecado produce todo tipo de muerte.
7. NOTA- No seamos fuente de tentación para los demás. Viva con cuidado. Entiéndase a sí mismo
8. NOTA- Conózcase a sí mismo y manténgase alejado de las fuentes de tentación.
C. Santiago reitera: Dios solo da cosas buenas Vs. 16-18
1. Vs. 16, 17– No se confunda acerca de lo que Dios nos da. Él solo da lo bueno.
a. Sí, puede ser difícil de soportar, pero eso no significa que Dios lo haga para mal.
b. Dios solo puede dar aquello que está diseñado para ser bueno o producir bien.
c. Padre de las luces. El sol siempre brilla, pero hay oscuridad solo cuando la Tierra se aleja del sol. No hay variación, ni siquiera una ligera sombra con Dios
2. V. 18- De su voluntad – Dios no fue ni pudo ser impulsado por nadie más.
a. No había nadie que necesitara persuadir a Dios para que nos diera a luz en el nuevo nacimiento.
b. Nadie persuadió a Dios para que enviara Su palabra de verdad. Lo hizo por su propia voluntad.
3. ¿Con qué fin?- Que lo que nos ha dado se convierta en fruto que hable de Dios.
a. Primicias- Esa primera generación de judíos que nació de nuevo.