I. La mujer Vs. 28, 29
A. Marginada por la religión
1. Los samaritanos eran odiados por los judíos religiosos. Juan 4:9
2. A los judíos no les gustaban los no judíos, despreciaban a las mujeres, nunca les hablaban en público.
3. Cuando un fariseo caminaba por la calle, se levantaba la túnica hacia el cuerpo para evitar tocar a un gentil.
4. Ella tenía una teología equivocada sobre la adoración a Dios. Muy antibíblica. Juan 4:19-24
B. Fracaso moral
1. Se había casado cinco veces y ahora vivía con un hombre. Juan 4:18
2. Históricamente, las mujeres sacaban agua por la mañana antes del calor del día.
3. Se conjetura que ella acudía al mediodía para evitar estar con las mujeres del pueblo.
a. Puede que hayan tenido una mala actitud hacia esta mujer.
4. 4:28- regresó al pueblo para hablar con los hombres. Quizás las mujeres la rechazaban.
C. Dispuesta a hablar
1. Esta mujer había tenido una larga conversación con Jesús.
2. Salió de esa conversación creyendo que Jesús era el Mesías prometido.
3. Ella lo creyó tanto que regresó a discutir la posibilidad con el pueblo.
D. Jesús amaba a esa mujer
1. No le preocupaba que lo vieran con esta mujer, o que ella fuera su portavoz.
2. No le preocupaba ser culpable por asociación a los ojos de los discípulos, o de otros judíos religiosos que pudieran escuchar esto. Jesús seguía en su objetivo.
a. Juan 8:29 “Porque yo hago siempre lo que le agrada.”
E. El resultado
La vida de esta mujer fue tan impactada por Jesús que ella fue la chispa que encendió el fuego del avivamiento en su ciudad..
II. Los samaritanos Vs. 30, 39-42
A. Apertura espiritual Vs. 30, 39
1. Estos hombres no se desanimaron por el mensajero (la mujer inmoral).
2. Si acaso la mujer era una mancha moral en la ciudad, no dejaron que eso les impidiera buscar la verdad.
3. Ellos fueron lo suficientemente abiertos y se impresionaron tanto como para salir y hablar con este judío.
4. Fue por el cambio de vida de esta mujer, el cual vino del amor de Jesús por la gente.
B. Prioridades espirituales Vs. 40-42
1. Los samaritanos conocían y sentían el desdén de los judíos, pero eso no los detuvo.
2. Hicieron a un lado la lucha cultural y la posible desaprobación de otros samaritanos.
3. Estuvieron dispuestos a ser corregidos espiritualmente, tal como lo había estado la mujer.
4. Estuvieron dispuestos a escuchar durante un período prolongado de tiempo y admitir que estaban equivocados.
5. Tomaron una decisión basada en las palabras de Jesús, no en su historia cultural / espiritual.
C. Jesús amaba a esas personas
1. Muchos judíos los habrían considerado una multitud hostil.
2. Los hubieran considerado intocables cultural y espiritualmente.
3. Jesús se quedó con ellos durante dos días, amándolos, enseñándoles, corrigiéndolos y escuchándolos.
III. Los discípulos Vs. 27, 31, 33
A. Se perdieron el significado espiritual V. 27
1. Los discípulos conocían las barreras culturales y religiosas que existían.
2. Confiaron en Jesús lo suficiente como para seguirlo, pero no como para preguntarle
sobre esta conversación.
3. Tal vez estaban demasiado arraigados en su cultura y religión y no entendieron el punto.
4. Se maravillaron de esto, pero se lo perdieron como una oportunidad de aprendizaje.
B. Se enfocaron en lo menor, lo natural Vs. 31, 33
1. Se enfocaron en lo menor (Jesús comiendo) y no preguntaron por lo mayor (¿por qué estás hablando con ella?).
2. Se enfocaron en lo natural y físico (Jesús comiendo).
3. Pasaron por alto lo más importante (el avivamiento que estaba a punto de suceder).
4. V. 33- Les preocupaba haberle fallado a Jesús o no haber visto que alguien más lo ayudara. (¿Alguien le ha traído algo de comer?)
5. Como estaban preocupados por lo menor, se estaban perdiendo lo mayor.
6. Comer no era malo, pero era lo menor.
7. Comer no requería conocimiento espiritual, pero comprender la obra de Jesús y el avivamiento que se avecinaba sí requería conocimiento espiritual.
8. Esos discípulos demostraron en qué pueden caer muchos seguidores de Jesús en la actualidad.
a. Centrarse en lo que no es inmediatamente importante y perderse de lo que sí lo es.
b. Centrarse en las necesidades de la carne y omitir los asuntos del Espíritu.
C. Jesús amó a esos discípulos – les enseñó e inspiró con paciencia
IV. Jesús Vs. 32, 34
A. Los caminos de Dios no son naturalmente conocidos por el hombre Vs. 32, 34
1. Los discípulos eran hombres relativamente buenos.
2. Dejaron atrás sus vidas para seguir a Jesús y aprender de él.
3. Necesitaban ser llenos del Espíritu Santo y ser equipados e instruidos.
4. Ellos vieron todo este acontecimiento con ojos naturales.
5. Jesús les dijo que Su sustento era algo que ellos ni siquiera podían entender.
6. Él los amó, los corrigió y los instruyó en la verdad.
7. Explicó por medio de una metáfora que Su sustento consistía en hacer la voluntad del Padre.
a. Como alimento para el cuerpo, lo sostenía y le daba energía.
b. Tenía apetito por ello.
c. De buena gana dejó la comida física para poder participar de la comida espiritual.
B. Jesús desea enseñarnos los caminos de Dios Vs. 35-38
1. V. 35– Jesús les explicó que tenían discernimiento natural pero les faltaba discernimiento espiritual. Necesitaban desarrollar el discernimiento espiritual, para ver las posibilidades espirituales a su alrededor.
2. Vs. 36, 37- Tanto los que siembran como los que cosechan son obreros de la mies espiritual.
3. El orador, el maestro, el predicador y el evangelista; todos sirven en la cosecha espiritual.
4. Los discípulos fueron enviados a cosechar, pero su éxito espiritual se basó en la enseñanza de otros, en los escritos de los profetas y los historiadores judíos, y en los grandes hombres y mujeres de Dios a lo largo de la historia de Dios trabajando con y a través del hombre.
5. A medida que los discípulos participaran de la cosecha, ellos mismos serían sostenidos y energizados espiritualmente, como Jesús.
6. Los discípulos fueron a la ciudad a comprar alimento, el testimonio de la mujer se convirtió en alimento para ella.
7. Jesús amaba a esa mujer, a esos samaritanos y a esos discípulos. Los condujo a la verdad.
“Busque el alimento de su vida en el trabajo de su vida”, dijo Phillips Brooks. La voluntad de Dios debe ser fuente de fortaleza y satisfacción para el hijo de Dios, como si se sentara a un banquete suntuoso. Si lo que estamos haciendo nos derriba en lugar de edificarnos, entonces bien podemos cuestionarnos si es la voluntad de Dios para nosotros