I. Sométanse a las autoridades de gobierno Vs. 1, 2
A. Sométanse
1. Someterse- hupotasso– cuando los soldados se ponen bajo la autoridad de alguien.
2. Esta es la primera actitud que debe tener el cristiano con respecto al gobierno.
3. Esto se repite en el versículo 5. 5Por lo cual es necesario estarle sujetos…
4. La mentalidad general del cristiano debe ser la de ponerse voluntariamente bajo el liderazgo del gobierno donde vive.
5. Ese es el lugar de partida y la configuración predeterminada. Esa debe ser nuestra primera actitud.
6. Marcos 12:17 “Dad a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios.”
a. El cristiano es responsable ante Dios y ante el gobierno.
7. Estar “en sujeción a” no siempre significa obedecer, pero la obediencia es donde comenzamos.
B. Las autoridadSométanse es gubernamentales son designadas por Dios
1. Dios ha ordenado que haya gobiernos, o de lo contrario la anarquía vendría sobre nosotros.
2. Pablo habla del ideal, no de las excepciones. Dios ordena el diseño y la existencia del gobierno humano. El gobierno humano es idea de Dios, y él lo establece.
3. Resistir al gobierno debido a un espíritu rebelde es rebelarse contra Dios. Algunas personas no quieren que nadie les diga qué hacer. Se resisten a la autoridad de cualquier tipo. Eso es un espíritu rebelde, y eso es rebelión contra Dios.
4. El Estado es una institución divina con autoridad divina.
5. Juan 19:11 “Ninguna autoridad tendrías contra mí, si no te fuese dada de arriba”.
a. Pilato abusó de la autoridad que Dios le había dado contra Jesús.
b. Dios no aprueba el mal uso de la autoridad que le da al hombre.
6. La actitud común de los cristianos no debe ser rebelde ni subversiva.
C. Las evidentes excepciones a este mandato
1. Pablo escribe sobre el ideal de Dios para el gobierno y por qué existe.
2. Escribe sobre el ideal de Dios para los ciudadanos y cuál debería ser su actitud predeterminada.
3. No está hablando de excepciones. No está discutiendo cuando la desobediencia civil está bien.
4. La Biblia a veces ordena la desobediencia civil y da ejemplos de ella.
a. Éxodo 1-Las parteras hebreas de Egipto desobedecieron la orden de Faraón.
Éxodo 1:17, 20, 21 17Pero las parteras temieron a Dios, y no hicieron como les mandó el rey de Egipto, sino que preservaron la vida a los niños 20Y Dios hizo bien a las parteras; y el pueblo se multiplicó y se fortaleció en gran manera. 21Y por haber las parteras temido a Dios, él prosperó sus familias.
b. Daniel 3– El rey Nabucodonosor promulgó una ley por la que todas las personas deberían inclinarse ante una imagen de oro, pero Sadrac, Mesac y Abednego desobedecieron. Fueron arrojados al horno de fuego, pero los salvó. El Rey quedó impresionado y protegió y ascendió a los tres muchachos, y castigó a quienes se les oponían.
c. Daniel 6– El rey Darío promulgó una regla de que nadie debía orar a nadie más que a él, pero Daniel desobedeció. Daniel fue arrojado al foso de los leones, pero Dios lo protegió. Darío promovió a Daniel y ejecutó a sus enemigos.
d. Hechos 4– El Sanedrín ordenó que nadie predicara en el nombre de Jesús.
Hechos 4:18-20 18Y llamándolos, les intimaron que en ninguna manera hablasen ni enseñasen en el nombre de Jesús.19Mas Pedro y Juan respondieron diciéndoles: Juzgad si es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios;20porque no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído.
Dietrich Bonhoeffer– Pastor luterano alemán, autor de “El costo del discipulado”. Resistió a la dictadura nazi de la Segunda Guerra Mundial y al programa de eutanasia y genocidio de los judíos. Se unió a un grupo que buscaba asesinar a Hitler, pero fue descubierto y ejecutado 23 días antes de que los alemanes se rindieran.
D. ¿Cuándo está bien la desobediencia civil para el cristiano?
1. Charles Colson– Cuando uno decide “demostrar su sumisión a Dios, no su desafío al gobierno”.
2. John Stott– “Debemos someternos hasta el punto en que la obediencia al Estado implique desobediencia a Dios. Pues si el Estado ordena lo que Dios prohíbe, o prohíbe lo que Dios ordena, entonces nuestro claro deber cristiano es resistir, no someternos, desobedecer al Estado para obedecer a Dios”.
3. Esto es muy diferente a desobedecer al Estado por razones personales, o por desagrado o desacuerdo sobre asuntos no bíblicos.
II. El propósito de las autoridades de gobierno Vs.3-5
A. Mantener el orden en la sociedad
1. Recuerde que Pablo está hablando del ideal de Dios y no de todas las realidades humanas.
2. Son ministros de Dios (siervos). V. 4
3. Existen para contener y castigar el mal. Llevan la espada y ejecutan ira.
4. También se supone que deben elogiar a los que hacen el bien. V. 3
B. Por qué obedecemos a las autoridades gobernantes
1. Para evitar su terror, espada e ira contra nuestras malas obras. V. 3
2. No tener que vivir con miedo V. 3
3. Tener la conciencia tranquila.
III. Por qué pagamos impuestos Vs. 6, 7
A. Apoyamos a los ministros de Dios
1. Son ministros de Dios. Están en su lugar por diseño de Dios, y los necesitamos.
2. Pagamos impuestos para que puedan servirnos a tiempo completo. Deben “asistir continuamente”.
3. Desafortunadamente, a veces estos siervos de Dios usan el dinero de nuestros impuestos para enriquecerse y financiar esfuerzos inútiles o malvados tanto en casa como en el extranjero.
4. Debemos hacer todo lo posible para responsabilizar a los funcionarios del gobierno por cómo gastan.
B. Por lo tanto, siga adelante
1. Pagar– pague y dé lo que es responsable de pagar y dar.
2. Pague sus impuestos y aranceles para que el gobierno pueda funcionar ininterrumpidamente.
3. Tema y respete a aquellos que tienen el poder ordenado por Dios para castigar sus malas acciones.
4. De honor a aquellos a quienes Dios ha ordenado para servirle a él y a usted.
IV. Pensamientos finales
A. Ore por nuestro gobierno
1 Timoteo 2:1-4 1Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres; 2por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad. 3Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador, 4el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad.
B. Si no está de acuerdo
1. Hágalo después de mucha oración, y luego hágalo con respeto y no para beneficio personal.
2. Si no está de acuerdo, que sea por el Reino de Dios.
3. Si le preocupa el Reino de Dios, asegúrese de someterse ahora.